El poder más grande de Satanás y cómo vencerlo

No es su poder para matar, ni para robar ni para destruir.

Esta fue quizás la segunda palabra de Dios que recibí en mi vida, dice así:

El mal no influye, engaña.


Y hoy lo entiendo, es la mentira el mayor poder satánico que hay, más sin embargo, no puede influir.



Juan 8: 44 Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla, pues es mentiroso y padre de mentira.


Cuando el Señor Jesús fue llevado al desierto, fue tentado de esta manera:


Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.

Su hambre no tenía que ser saciada en una demostración de su divinidad, Él sería servido por los ángeles posteriormente, pues vino a ser Dios como humano en todas las cosas, no a satisfacer sus deseos carnales con Su poder para demostrarle a Satanás quién es.


--Si eres Hijo de Dios, tírate abajo, pues escrito está:
»“A sus ángeles mandará acerca de ti”,
»y»“En sus manos te sostendrán,
para que no tropieces con tu pie en piedra”

Suicidio es pecado y en este caso era tentar a Dios a salvarlo.


lo llevó el diablo a un monte muy alto y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, 9 y le dijo:
--Todo esto te daré, si postrado me adoras.



Satanás iba a ser derrocado, para eso vino el Señor, para expulsar al príncipe de este mundo y para gobernar Él, no iba a dejar de hacer ninguna de las dos.


Y por útlimo, el arma contra esta potestad:

¡La palabra de Dios!


Vete, Satanás, porque escrito está: “Al Señor tu Dios adorarás y solo a él servirás”.

11 El diablo entonces lo dejó.

(Tomado de Mateo 4).


El espíritu de mentira es el género (porque los hay pequeños y grandes del mismo género) más poderoso, en las guerras que hemos librado en nuestras vidas podemos ver cómo se nos han lanzado espíritus de mentira y cómo hemos vencido, con Jesucristo, es decir, con la palabra de Dios.


Y esta potestad se reprende, y se declara el poder de Dios, algo que debemos tomar en cuenta, que no sólo es decir: ¡En el nombre de Jesús reprendo todo espíritu de mentira! De hecho nunca lo he hecho, sino que estar apercibido creo que es lo más importante, velando y orando para no creer mentiras y por lo tanto caer en tentación. Aunque siguiendo el ejemplo del Señor, veo que es importante hacerlo.


Da mucho que pensar que Satanás tuvo al Señor Jesús de balde en ese momento para tentarlo, y decidió hacerlo con lo que más tenía, su naturaleza, su verdadero género: El espíritu de mentira.


2 Crónicas 18:21 Él respondió: “Saldré y seré espíritu de mentira en la boca de todos sus profetas”. Jehová dijo: “Tú lograrás engañarlo. Anda y hazlo así”.

Una de las consecuencias de la mentira son las "Prisiones de oscuridad". Allí hay enfermedad, derrota, pobreza espiritual y física, ataduras que no se ven pero se sienten, como un preso que sabe que está atado porque no puede salir pero no ve sus cadenas ni sabe dónde está la puerta de salida.

La única solución viene a través de la Sangre de Cristo:


Zacarías 9:11 Tú también, por la sangre de tu pacto, serás salva; he sacado a tus presos de la cisterna en que no hay agua.


Porque gracias a Su sangre, tenemos acceso al lugar santísimo, es en Su presencia en que recibimos la luz que disipa las tinieblas y las obras del diablo, es allí donde recibimos sanidad y liberación, pues estos demonios huyen, porque fueron expuestos públicamente en la cruz todos los decretos de maldición contra nosotros y sus potestades responsables (Colosenses 2).