Se me ocurrió hacer este lugar pensando en que muchas veces pasamos por dificultades y al contárselas a alguien nos consuela y alienta a buscar soluciones en base a sugerencias frescas. ¡Cuántas veces necesitamos de una palabra que nos inspire companía y que nos haga ver que: ¡eso no es nada! no te preocupes demasiado pues pronto pasa. ¡Lo he visto tantas veces! siempre habrá momentos buenos y momentos malos. En estos días viendo una de estas situaciones pensé: debería haber en todas partes centros así como los hay para drogadictos, alcohólicos, ancianos o niños de la calle etc, que se encarguen de consolar; me imagino a alguien con uno de estos conflictos por sencillos que parezcan (problemas con un vecino, asuntos en el trabajo, en casa, depresión, etc) llegar a uno de estos centros o acá mismo y exponer su caso. Un círculo de personas le escuchan con deseos de ayudarle y entonces cada uno empieza a dar sugerencias y a animarle. De seguro no saldrá la misma carga.
Es esa pues la intención de este rinconcito de la cabaña.
Recuerdo varios casos en mi transitar por este mundo internauta: una hermana se comunicó conmigo una vez y me dice: Ayúdeme. alguien quiere suicidarse. Ella había hecho una parte del trabajo. Le dije que me lo pasara por el mismo messenger y allí complementamos la labor que Dios nos encomendó. Hube de luchar contra el espíritu que le dominaba. Otra vez un joven cristiano me pidió ayuda porque sentía una extraña presencia luego de caer en una experiencia homosexual...
Tal vez su problema sea en apariencia muy sencillo: por ejemplo: estoy muy deprimido pues todo me sale mal; o mi vecino lanza su basura al frente de mi casa o estoy muy triste por las cosas que pasan en mi congregación. Sea cual fuere, además de orar al Todopoderoso; El mismo nos podrá inspirar ideas para animarle.
Dios nos ilumine y ayudémosnos mutuamente.