He aqui se junto conmigo todos los afligidos y oprimidos, entre ellos Natanael, Husai, e Itai
Salimos pues de Adulam, y llegamos a Carmel.
Habia en Carmel una mujer llamada Jezabel, madre de Atalia
Ella era muy rica, solicitamos pues, unos cuantos panes y unos siclos de plata, ya que nuestros acreedores nos perseguian.
Entonces dijo Jezabel: ¿ Quien es ese perro muerto de Josafat, para que yo lo ayude?
Observe muy afligido a Natanael, ya que Doeg planeaba matarlo sino le pagaba
Venida la noche, hurtamos cinco siclos de plata, asi Natanael y yo pagamos nuestras deudas.
Siendo Jezabel una mujer muy perversa, y teniendo por hijos a Nabal, y Lahmi temimos por nuestra vida, asi que huimos a Siclag.
Teniendo yo, parentesco con la casa de Acab, me afligi mucho, ya que escuche que Lahmi, entre otros , planeaban apredearme, ya que habia tomado a Atalia, y la habia mandado a Gat, y me angustie aun mas, ya que habia hurtado los siclos de plata de Jezabel, y pense que el dia que se enteraran, mandarian buscarme para aserrarme.
Dije entonces a Natanael
Dad la sidra al desfallecido,
Y el vino a los de amargado ánimo.
Beban, y olvídense de su necesidad,
Y de su miseria no se acuerden más.
He aqui, bebimos, y por un momento nos olvidamos de nuestra miseria