Apocalipsis 5:5 Y vi en la mano derecha del que estaba sentado en el trono un libro escrito por dentro y por fuera, sellado con siete sellos.
5 Y uno de los ancianos me dijo: No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David,
ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos.
Aperturo este tema con este punto de referencia: Jesucristo VENCIÓ para PODER abrir el libro y desatar sus siete sellos. Siendo que Jesús murió en la cruz para salvarnos y no para castigarnos, es ilógico pensar que al desatar cada sello, se desatará una calamidad en la tierra. Eso no tiene lógica con lo que se viene describiendo acá.
Vamos con los jinetes:
Apocalipsis 6:1 Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira.
2 Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer.
Lo primero es que se le dice: Ven y mira. Juan tendría que acercarse al trono frente al cual están los cuatro seres vivientes, para poder ver el jinete con el caballo blanco, de primer plano tenemos REVELACIÓN.
No sé sinceramente qué representa este jinete. Algunos dicen que es el evangelio, o Jesucristo, o el anticristo, la ICAR...
3 Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente, que decía: Ven y mira.
4 Y salió otro caballo, bermejo; y al que lo montaba le fue dado poder de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran espada.
Rojo o bermejo, símbolo de sangre, la espada es la guerra que fue desatada sobre la humanidad. ¿La guerra es algo nuevo?
Cualquier cristiano de esta época que hubiese vivido entre 1920 y 1950, pensaría que el fin del mundo era inminente, pues en esos tiempos se desataron la primera y la segunda guerra mundial, que fueron los confllictos bélicos de mayor repercusión en la historia, con enormes bajas y daños en la humanidad. Fue en este corto período de la humanidad donde se estrenaron los aviones de combate, los misiles, tanques modernos y hasta bombas atómicas. El desastre fue abrumador. Pero no fue el fin. De hecho, Jesucristo dijo que el fin no sería con guerra. Este jinete está suelto.
5 Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente, que decía: Ven y mira. Y miré, y he aquí un caballo negro; y el que lo montaba tenía una balanza en la mano.
6 Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero no dañes el aceite ni el vino.
Esto no es más que pobreza y hambre, el denario era el pago de una día de trabajo, y sólo alcanzaría para comer.
Algunos datos alarmantes sobre la pobreza, según Wikipedia:
100.000 personas mueren de hambre al día.
Cada 5 segundos un niño menor de 10 años muere por falta de alimento.
Más de 1.000 millones de personas viven actualmente en la pobreza extrema (menos de un dólar al día); el 70% son mujeres.
Más de 1.800 millones de seres humanos no tienen acceso a agua potable.
1.000 millones carecen de vivienda estimable.
840 millones de personas malnutridas.
200 millones son niños menores de cinco años.
2.000 millones de personas padecen anemia por falta de hierro El hambre crónico afecta a casi el 15% de la población en el mundo (unas 1000 millones de personas).
¡QUÉ TENEMOS QUE VER PARA CONFIRMAR QUE ESTE JINETE ANDA SUELTO!
Continúo con el texto bíblico:
7 Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente, que decía: Ven y mira.
8 Miré, y he aquí un caballo amarillo, y el que lo montaba tenía por nombre Muerte, y el Hades le seguía; y
le fue dada potestad sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad, y con las fieras de la tierra.
Este jinete es una manifestación más poderosa del segundo y tercer jinete: Este mata con guerra, con hambre, pero también con pestes y con "fieras de la tierra" lo cual se puede interpretar como cataclismos (tsunamis, terremotos, tormentas, etc).
Éste tiene poder sobre la cuarta parte de la tierra. No explica el versículo si la cuarta parte es de la humanidad o el área de la superficie terrestre. Lo cierto es que la cuarta parte de la humanidad ya ha sido destruida; el caso más obvio fue la peste negra que azotó a Europa y mató a la cuarta parte de la población mundial en unos 3 años.
Los jinetes han estado sueltos, desde hace tiempo, pero no es sino cuando el sello es desatado, que a Juan se le da orden de verlos desde los cielos: "Ven y mira".
Cuando una carta tenía un sello en esa época, nadie podía abrirlo, leer el mensaje y volverlo a tapar sin que se dieran cuenta, pues era necesario romper el sello que tenía una inscripción difícil de reproducir (por eso los reyes tenían su propio sello, para certificar los mensajes que iban lejos). Por lo tanto los sellos se abren para revelar cosas. De hecho ese es el fin de Apocalipsis: Revelarnos a Jesucristo.
La Iglesia tiene que detener la manifestación del caballo amarillo, humillada intercediendo, de manera unánime y en santidad (son cosas que he visto del Señor que se han ido ordenando conforme pasa el tiempo).