No sé si fue un demonio muy fuerte o qué.
Acordé en mi iglesia orar por el evangelismo de 1 a 2 AM la semana pasada. El primer día, el lunes en la madrugada, me acuesto en una hamaca que tengo en mi cuarto (gloria a Dios qué bendición) para no acostarme en la cama y quedarme dormido, y al momento de empezar a orar veo en visión a un hombre malo con capucha negra que me observa, y de inmediato sentí un temor fuerte, una presencia maligna, casi tiemblo de miedo.
Oré al Señor recordándole Su palabra, de que no estoy sólo Él me acompaña todos los días hasta lo último de la tierra, etc, etc, etc. A los minutos se me fue pasando.
Tuvimos ataques raros algunos hermanos, yo mismo fui testigo de los ataques contra otro hermano que también se propuso a orar. Luego nuestro pastor hablaba de esos ataques, no fuimos los únicos.
A Dios sea la gloria que lo que ha nacido de nuevo el maligno no lo puede tocar!