Así es, Hermano Voz, amén, su inmensa misericordia es la que nos sostiene...
"Pero yo cantaré de tu poder,
y alabaré de mañana tu misericordia;
porque has sido mi amparo
y refugio en el día de mi angustia.
Fortaleza mía, a ti cantaré;
porque eres, oh Dios, mi refugio, el Dios de mi misericordia. Salmos 59"
Nada es mejor que estar siempre en humildad delante del Señor (y no para exigir), de esa manera seremos testigos de Sus bondades y Su amor para con sus fieles, los que temen ante Su presencia! Bendito el Nombre del Señor!.